Caborca, Sonora.- Una fiesta familiar terminó con una zacapela entre policias y ciudadanos en el inicio de las tradicionales posadas familiares donde los servidores públicos pidieron refuerzos.
Eran las 11 de la mañana cuando la alteración del orden público irrumpió los domicilios contiguos en el área de la calle 36 entre avenidas Santa Ramona y Santa María y las llamadas telefónicas movilizaron s los policías.
Los primeros en llegar fueron los oficiales Luís Carlos López Aguirre y el sub oficial preventivo Juan Diego Gutiérrez Jáuregui a bordo de una de camionetas identificadas con el emblema de proteger y servir.
Esta leyenda resultó vana en esos momentos ya que fueron recibidos por una serie de golpes de un trío de personas que vociferaban cuanta palabra insultante por lo que ambos se pusieron en guardia.
Con la ayuda de otros agentes y después de rodar por el suelo para atraparlos los agentes municipales lograron someterlos y subirlos a las patrullas para retirarse del populoso barrio de la Santa Cecilia.
En la comandancia fueron presentados ante el juez calificador en turno manifestando cada uno de ellos llamarse Sergio Juárez Valenzuela, Gildardo López Zazueta y Román Robles Alcaraz.
Posteriormente los remitieron ante el agente del Ministerio Público del Fuero Común por los delitos de resistencia de particulares y lo que resulte en perjuicio de los representantes de la autoridad.
Eran las 11 de la mañana cuando la alteración del orden público irrumpió los domicilios contiguos en el área de la calle 36 entre avenidas Santa Ramona y Santa María y las llamadas telefónicas movilizaron s los policías.
Los primeros en llegar fueron los oficiales Luís Carlos López Aguirre y el sub oficial preventivo Juan Diego Gutiérrez Jáuregui a bordo de una de camionetas identificadas con el emblema de proteger y servir.
Esta leyenda resultó vana en esos momentos ya que fueron recibidos por una serie de golpes de un trío de personas que vociferaban cuanta palabra insultante por lo que ambos se pusieron en guardia.
Con la ayuda de otros agentes y después de rodar por el suelo para atraparlos los agentes municipales lograron someterlos y subirlos a las patrullas para retirarse del populoso barrio de la Santa Cecilia.
En la comandancia fueron presentados ante el juez calificador en turno manifestando cada uno de ellos llamarse Sergio Juárez Valenzuela, Gildardo López Zazueta y Román Robles Alcaraz.
Posteriormente los remitieron ante el agente del Ministerio Público del Fuero Común por los delitos de resistencia de particulares y lo que resulte en perjuicio de los representantes de la autoridad.
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